Soy un buen vecino




¿Cómo me puede pasar esto a mí?
¡Llamarme la atención porque mi casa huele!
Aunque me ven como saco la basura todas las noches.
Con la pereza que me da.
Soy cumplidor… y más disciplinado que indolente.
Me da apuro hacerme notar.
Siempre fui un vecino ejemplar… y hasta virtuoso.
No pienso dejar de serlo.
Esta noche, inexcusablemente, sacaré los restos que quedan en la basura y, personalmente, sin ayuda de los basureros, la depositaré en el camión, como las noches anteriores.
Lograré alejar ese hedor y que dejen de mirarme como a un apestado.
Nunca pensé que el torso de mi mujer era tan voluminoso, si no fuera por eso ya habría acabado de sacarla. 



© Alberto Giménez Prieto «Lumbre»
Microrrelato finalista en el X Concurso Literario Canyada d´Art 2019




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